Nairo Quintana, líder del Movistar!

Como es tradicional en el último día de la semana, se reunió el clan Marielo’ para disfrutar de su más querido placer, la flaca; en esta ocasión un reducido grupo inició la travesía que los llevaría por el occidente de la capital antioqueña, pasando por la zona lechera, hasta llegar a Belmira en el norte del departamento.

Como suele suceder en la accidentada geografía paisa, se inició la primera ascensión del día, que sería además la única larga, que con sus más de 16 km. se convierte en un duro escollo que superar, se trata de la muy mencionada loma de San Félix, que saliendo por la vía al mar, está siendo recuperada paulatinamente, ante el lamentable estado en el que se encontraba hace poco tiempo, y que obligó a cambiar de destino  a los enamorados del deporte de las bielas.

En esta ocasión, la vía fue encontrada en aceptables condiciones, por los ruteros, que vieron como fueron obligados a detenerse ante el pinchazo de Urrao, que fue castigado por los designios del destino, por no llevar neumático de repuesto, corroborando una vez más la “ley de Murphy”.

Superado el desperfecto mecánico, se continuó el ascenso en compañía de Pericles (“Gringo”), quien dejó su tierra natal en el norte del continente americano, para venir a disfrutar de este bello deporte en compañía del grupo, conociendo a la vez los magníficos paisajes de la bella tierra que produce el mejor café del mundo;  siendo fascinado con la hermosura de los paisajes que recorría.

Poco antes de llegar al alto, el Médico lanzó un tímido ataque, que fue seguido precisamente por el extranjero, quien sostuvo el ritmo del primero pasando por la zona de los cometistas, y se relajó para esperar al grupo que rodaba un poco más atrás, ante la advertencia del galeno que le indicó astutamente que faltaban los 2 kilómetros más duros de toda la cuesta.

Al llegar al alto, algunos aprovecharon para aprovisionarse, y rápidamente reiniciaron la marcha con rumbo a San Pedro de los milagros, el recorrido hasta el mencionado municipio se realizó de forma relajada, sin presionar para avanzar, lo que pareció un acuerdo tácito de no agresión, y que fue aprovechado para departir alegremente; uno de los temas a los que se llegó a un acuerdo, se relaciona con el ilustre Vampirín (“Enano”), de quien se dijo que solo salía con los Marielo’s, cuando no tenía otra opción … esperemos su reacción!

Mientras el Profe rodaba como ya es habitual en el fondo del lote, fue acompañado por el renovado Leña, quien parece haber regresado a las carreteras mucho más robusto; el resto del pelotón rodaba soporíferamente, por lo que Pala puso un punto más, y ahí fue la de troya; el Monito salió a demostrar que a pesar de su desteñido copete, sigue siendo el ave con más plumas del corral, y de inmediato se desató un fárrago impresionante, pues los que tenían arrestos físicos, se unieron al tándem inicial, para formar una fuga que sumaría minutos en su favor con el fuerte ritmo impuesto.

Primero fue Pala, pero pronto, al insinuarse los primeros repechos que aderezan la ruta, fueron otros los que tomarían el relevo, haciendo que “Gringo” perdiera el paso y se descolgara hasta el segundo grupo, mientras Fastástico apretaba los dientes para impulsar este lote, que poco a poco perdía unidades, pues Monito “sacó la mano”, siendo acompañado por el promotor de la aceleración inicial, mientras en el grupo de la sabrosura, sufría un pinchazo el mismísimo Carlomagno.

Al pronunciarse la inclinación de los repechos, y hacerse estos más largos, fue Fastástico el primero en acusar fatiga, y poco después se vio ceder terreno al Médico, por lo que Oscarice y Urrao se enredaron en un encarnizado duelo que fue definido al “reventar” el primero poco antes de coronar la cima, quedando ad portas de ser alcanzado por el Médico, que nunca los perdió de vista.

Con una ventaja de 300 metros, Urrao se aferró al primer puesto, mientras Oscarice luchaba con toda su energía para conservar los pocos metros de ventaja que tenía respecto al Médico que a su vez luchaba con todas sus fuerzas para vencer las fuertes ráfagas de viento que amenazaban con devolverlo a San Pedro.

La reagrupación se realizó en el parque de Belmira, donde además se recargaron energías con una opípara vianda compuesta por almojábanas, pasteles, frutas y bebidas, que saciaron el estómago de todos, y permitieron realizar el recorrido de regreso, pues aunque ya habían recorrido más de 70 kilómetros, solamente completaban la mitad del mismo.

Como es tradicional, el más acucioso en la alimentación fue Urrao, seguido de cerca por el Profe y Sancocho, mientras el que menos comió fue como siempre Carlomagno; los demás consumieron lo suficiente para regresar, pero sin dar la ventaja de aumentar significativamente de peso, por eso el regreso comenzó relativamente rápido, y en una calma pasmosa, que permitió al Profe tomar una pequeña ventaja, desde las propias calles del municipio de la trucha y el ‘bel lo … mira r’.

La ventaja del Profe se hizo más amplia, después de que un nuevo pinchazo de Urrao, detuviera la caravana mientras se solucionaba el desperfecto, lo que sumado con el ritmo hiperrelajado que llevaba el lote, permitió que el escalatore de 100 kilos, tomara las de Villadiego por un buen tramo del recorrido; pero la posibilidad de que llegara primero al Gran Cacao, sitio donde sabían sería la reagrupación definitiva, prendió las alarmas, y se escuchó decir al Médico, que una vez superado San Pedro, y el alto de la quesera, aumentaría la velocidad, en procura de dar alcance al fugitivo.

Pues dicho y hecho, una vez superaron la cota mencionada, el susodicho pasó por un lado aumentando drásticamente la velocidad, por lo que muy rápido se encontró aventajando al grueso del colectivo, llevándose a su rueda como era de esperarse al Monito; aunque esperaban realizar una larga y fatigosa persecución, a los pocos kilómetros dieron alcance al Profe, con lo que pareció concluida la aventura; sin embargo el Monito quiso continuar con ella y conminó al Profe a ayudar en la fuga, a lo que el interpelado respondió que venía guardando, así que si se ponía con ‘bobadas’, atacaría dejándolos con los crespos hechos.

Ante ese vaticinio del Profe, el Monito lanzó un furibundo ataque, que verdaderamente daría lástima entre los más eximios velocistas, por lo que dio pie al Profe de lanzar un fuerte apretón, que dejó al primero dando vueltas como un trompo, siendo auxiliado por el Médico, quien ofreció su rueda para perseguir al fugado.

Con el piloto automático encendido, el mencionado tándem rodó tan solo unos metros detrás del Profe, hasta cuando la inclinación se tornó a favor, pues en ese momento, para honrar sus descoloridas plumas, el Monito que hasta entonces parecía más un cadáver, se descolgó como una bala, pasando por el lado del gordito en forma rauda, por lo que este también aceleró intentando capturar el ave soñadora.

Pero todo terminó cuando el terreno picó hacia arriba, pues tan solo unos metros después el par de retadores pareció derretirse ante el incesante sol canicular del medio día, pues su paso solo produjo risa en los demás integrantes del grupo que lograron verlo desde la distancia; de los tres, el primero en coronar la cima fue con gran ventaja el Médico, y el Monito logró con todas sus fuerzas asirse al segundo escalón  del podio, mientras el Profe veía como pasaban como flechas Oscarice, Sancocho, y un poco después el resto del pelotón que con Urrao, Carlomagno, Leña, Gringo y Fastástico, lo superaron fácilmente, dejando el intento del aludido en el penúltimo lugar, pues un pálido Pala sería el único incapaz de ganarle.

El resto del recorrido fue de puro trámite, y de no ser por un nuevo pinchazo en el descenso, no hubiese ocurrido nada; por lo que cada uno se dirigió a donde sus seres queridos con las baterías nuevas y con la alegría, satisfacción y gozo de terminar otra jornada inolvidable, al lado de sus colegas y amigos.

En la próxima salida, se espera que retornen al seno de su clan, quienes por diversas circunstancias no pudieron acompañarlos, entre quienes se destacan el Animal, Zurriburri, Vampirín, Monstruo, Juandiego, Tabáres, Morita, Bedoya, Conrado, Morales, Magnelly, Ingeniero y todos los demás integrantes del mejor combo de ciclo turismo del país o tal vez del mundo.